Una vez más, el ciclo televisivo sorprendió a su audiencia con una determinación que no pasó desapercibida. Esta vez, no se trató de una pelea ni de una estrategia dentro del encierro, sino de una medida por parte del equipo detrás del programa que generó un verdadero estallido de críticas entre los fanáticos en redes.
Todo comenzó con la responsabilidad de Selva, quien en su rol de referente semanal, tuvo que definir el listado de participantes en riesgo. El grupo ya contaba con varios nombres en la cuerda floja, entre ellos figuras que vienen acumulando tensión en el juego.
En una conversación con el conductor, la líder optó por excluir a uno de sus aliados, justificando la elección por la alianza que comparten desde hace tiempo.
Más adelante, tomó una determinación que sorprendió al elegir a Sandra como posible candidata a abandonar el certamen. Argumentó que cada jugador empieza a representar una amenaza y por eso era hora de resguardarse. A pesar de la sorpresa, ambas mantuvieron un tono cordial, aunque el momento generó cierto malestar en el ambiente.
📺 Se viene gala doble: comienza el domingo y termina el lunes con una nueva eliminación ❌
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— Gran Hermano (@GranHermanoAr) May 2, 2025
Finalmente, se confirmó la nómina de aspirantes a abandonar la competencia, pero lo que realmente encendió la discusión fue lo que ocurrió a continuación: se anunció que el proceso de eliminación no se realizaría de forma habitual, sino que se dividiría en dos instancias separadas, lo que generó sospechas entre los seguidores del ciclo.
En plataformas digitales, las teorías no tardaron en explotar. Muchos comenzaron a suponer que esta maniobra buscaba favorecer a una de las jugadoras en conflicto. Frases como “no lo disimulan” o “quieren influir en la votación” se multiplicaron, especialmente por la decisión de fragmentar el momento clave del programa.
A esto se sumaron quejas sobre la manera en que se muestran las imágenes, el enfoque de las escenas y hasta el orden en que se presentan los discursos. La pregunta que se instaló en el debate público fue contundente: ¿están intentando inclinar la balanza? ¿O se trata de una coincidencia?
Con este panorama, el reality volvió a quedar en el centro del escándalo, atrapado entre decisiones cuestionadas, sospechas del público y una rivalidad que promete más capítulos. ¿Será justicia o favoritismo? La audiencia ya sacó sus propias conclusiones. ¿Vos qué pensás?