En medio de la transición presidencial, un enfrentamiento verbal ha surgido entre el secretario general nacional de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, y el presidente electo Javier Milei. La controversia se centra en la afirmación de Milei sobre la posibilidad de recortar el aguinaldo de diciembre en el sector público. Siendo así, deja a los estatales sin aguinaldo.
ATE ha respondido con contundencia, acusando a Milei de priorizar el ajuste en los trabajadores en lugar de abordar la deuda externa con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
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Milei propone dejar a los estatales sin aguinaldo
Aguiar, en un comunicado oficial, expresó que la «motosierra» de Milei ataca directamente el aguinaldo de los trabajadores, insinuando que la nueva administración podría estar considerando medidas impopulares en el ámbito laboral.
Además, resaltó que esta acción contradice la histórica conquista de los derechos laborales, especialmente el aguinaldo, incorporado a la Ley de Contrato de Trabajo en 1945.
ATE argumenta que la gestión entrante parece inclinarse hacia el ajuste en el empleo público en lugar de abordar la deuda externa con el FMI. Esta postura ha generado preocupaciones sobre el impacto en la estabilidad económica y la paz social.
ATE subraya que el aguinaldo es un derecho adquirido desde 1945 y que su no pago constituiría una violación de un derecho de orden público. La organización sindical acusa a Milei de desestimar la ley y amenazar la paz social.
Perspectiva de Milei
Milei, por su parte, ha defendido la necesidad de alcanzar el equilibrio fiscal y ha indicado que el gasto público debe ajustarse para lograrlo. En una entrevista, Milei afirmó que, si el país gasta 120 y recauda 100, entonces el gasto debe ajustarse para no exceder los ingresos. Esto incluiría recortes en el ámbito público.
La disputa entre el gremio estatal y el presidente electo refleja las tensiones inherentes a las políticas económicas en juego durante la transición. Mientras Milei aboga por la austeridad fiscal, el gremio insiste en la protección de los derechos laborales como prioridad.
Siendo de esta manera, en las últimas horas se originó debate, ya que muchas personas lo consideran controversial. El escenario político y económico en los primeros meses de la nueva administración será crucial para determinar cómo se manejarán estos desafíos. Ya que entrando un gobierno nuevo, existe la posibilidad de que se realicen cambios.