Si sos amante del café y estás buscando una alternativa fácil y rápida para darle un toque original a tus desayunos o meriendas, esta crema de café es ideal para vos.
Se trata de una receta sencilla y económica que vas a poder hacer con tan solo tres ingredientes.
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Además, no vas a necesitar ni crema de leche, ni gelatinas, ni ningún ingrediente complicado.
Ingredientes necesarios para preparar la crema de café:
- 120 gramos de azúcar
- 140 ml de agua bien fría
- 35 gramos de café instantáneo
Preparación paso a paso:
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Comenzá asegurándote de que el agua esté realmente fría. Para lograr esto, te recomiendo colocar el agua en el freezer durante unos minutos antes de empezar. Ojo, no queremos que se congele; solo que esté bien fresca para conseguir mejor textura en la crema.
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En un recipiente o bowl amplio, poné el café instantáneo y añadí el azúcar. Mezclá brevemente estos dos ingredientes secos.
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Incorporá el agua bien fría al recipiente. Con una batidora eléctrica, empezá a batir a velocidad media. Este paso es clave para obtener una consistencia cremosa y espumosa. No te preocupes si al principio la mezcla parece muy líquida, es completamente normal.
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Seguí batiendo durante aproximadamente 3 o 4 minutos. Vas a observar que la mezcla comienza a espesarse y adquiere un color marrón claro. Continuá batiendo hasta que logres una crema bien aireada, firme y que al levantar la batidora deje picos bien formados.
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Antes de finalizar, probá la crema y fijate si está en el punto justo de dulzor que preferís. Si te parece necesario, agregá un poco más de azúcar y volvé a batir unos segundos para integrarla perfectamente.
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Una vez que tengas la crema lista, podés servirla inmediatamente o guardarla en un recipiente hermético dentro de la heladera para mantener su textura.
Consejos:
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Para un toque extra de sabor y presentación, podés decorar la crema con cacao en polvo, ralladura de chocolate o una pizca de canela molida por encima justo antes de servirla.
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Si querés que la crema tenga un gusto más suave, podés reemplazar una parte del café instantáneo por cacao amargo. De esta manera obtendrás una crema moka deliciosa y diferente.
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Guardá la crema en la heladera si no vas a consumirla inmediatamente. Así mantendrá su consistencia por más tiempo.
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Te sugiero acompañarla con galletitas dulces, tostadas francesas o budines caseros, ya que la combinación es deliciosa y realza aún más su sabor.
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Además, podés aprovechar esta crema para rellenar tortas, alfajores o utilizarla como cobertura en diferentes tipos de postres.
Esta crema de café es tan fácil y rica que seguro se convierte en una de tus recetas favoritas.
Animate a prepararla para tu familia o amigos; estoy seguro de que van a quedar encantados. ¡A disfrutar!
