El famoso coreógrafo y productor Flavio Mendoza compartió recientemente una situación que está atravesando con su hijo Dionisio, quien ha cambiado su actitud desde que comenzó la escuela.
Con preocupación y algo de tristeza, Flavio expuso cómo las influencias externas han afectado la forma en que cría a su hijo.
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Dionisio y los cambios tras empezar el colegio
Flavio Mendoza, conocido por su exitosa carrera en el mundo del espectáculo, también es un padre devoto que siempre ha buscado criar a su hijo Dionisio con amor y libertad.
Sin embargo, desde que el pequeño comenzó el colegio, Flavio ha notado un cambio significativo en su actitud, particularmente en cuanto a las normas de género impuestas por la sociedad.
En una entrevista en el programa «Soñé que volaba», Flavio contó cómo ha tenido que enfrentar la resistencia de su hijo a ciertas prácticas que antes disfrutaban juntos.
«Siempre le dije que podía elegir los colores que quisiera, que no hay colores de nena o de nene», explicó Flavio.
Pero las cosas cambiaron cuando Dionisio empezó la escuela. «De un día para el otro, me vino con que el celeste es de nene y el rosa es de nena», relató con desilusión.
La situación se volvió aún más delicada cuando Dionisio rechazó una de las actividades que solían compartir: hacerle trencitas en el cabello.
«Yo le hacía trencitas y le encantaba, pero ahora no quiere que le toque el pelo. Me dice que las trencitas son de nena, y eso es algo que le transmiten los demás en la escuela», comentó Flavio, visiblemente afectado por la situación.
Esta experiencia le hizo reflexionar sobre cómo, a pesar de los avances en la sociedad, las viejas ideas sobre género siguen influyendo en los más pequeños.
La relación de Dionisio con la tecnología
Además de hablar sobre los desafíos que enfrenta con la crianza de Dionisio en relación con las normas de género, Flavio también compartió su postura respecto al uso de la tecnología por parte de su hijo.
A diferencia de muchos niños de su edad, Dionisio no tiene acceso a ciertos dispositivos que son comunes entre sus pares.
«En mi casa, no hay PlayStation ni esos aparatos que considero perjudiciales. Dionisio tiene un iPad que usa un ratito y, a veces, ni siquiera funciona bien», reveló Flavio.
Con firmeza, agregó: «Jamás van a ver a mi hijo con mi teléfono. Prefiero que disfrute de otras cosas, como jugar al aire libre o pasar tiempo con su familia».
Estas revelaciones de Flavio Mendoza muestran la difícil tarea de criar a un hijo en un mundo lleno de influencias externas.
A pesar de los retos, Flavio sigue firme en sus convicciones y se esfuerza por darle a Dionisio una infancia plena, libre de estereotipos y centrada en el amor y la libertad de ser quien realmente es.
