Lizy Tagliani, la carismática conductora de «La Peña de Morfi«, emocionó a todos al revelar en una entrevista con Telefe Noticias que está a punto de cumplir uno de sus mayores sueños: convertirse en mamá.
Acompañada por su marido, Sebastián Nebot, Lizy compartió detalles íntimos sobre el proceso de adopción que están atravesando y cómo este ha impactado profundamente en sus vidas.
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La emoción de Lizy al hablar sobre la adopción
En una charla sincera con Rodolfo Barili y Pilar Smith, Lizy confesó que, aunque aún faltan algunas audiencias judiciales, ya están en la etapa de vinculación con un pequeño.
«Estamos hace un tiempo con Sebas en los trámites de adopción y finalmente llegó el momento de la vinculación con una personita. Si Dios quiere, tenemos grandes posibilidades de ser su familia y estamos muy emocionados, muy movilizados», declaró con alegría.
Un proceso largo pero lleno de esperanza
Lizy destacó que, por razones de privacidad y para proteger la identidad del menor, no pueden revelar detalles específicos sobre él.
«No se puede hablar de la personita, ni datos, ni su nombre, ni mucho menos su imagen, por una cuestión de cuidar su identidad. Es un proceso bastante largo, pero estamos muy contentos y emocionados, con una gran alegría», comentó, visiblemente conmovida.
La magia de la vinculación
El proceso de vinculación es crucial en la adopción, ya que permite a los futuros padres y al niño establecer una relación sólida antes de la adopción definitiva.
Lizy expresó su esperanza y felicidad al estar tan cerca de este logro: «Tener la posibilidad de cambiarle la vida a alguien, ojalá que para mejor, y hacer todo lo posible a partir de ahora. Con Sebastián tenemos la ilusión de que salga bien porque vamos avanzando de una manera tan grande».
Un sueño que se hace realidad
Lizy no pudo contener las lágrimas al describir lo mágico que ha sido todo el proceso: «Estamos muy contentos con Sebastián y decimos que es hermoso porque va a parir nuestro corazón. Como sea, es mágico. Es una personita tan inocente con tanto y tener esta posibilidad es maravilloso».
Con estas palabras, Lizy dejó claro que, más allá de las dificultades y la espera, la adopción les ha traído una inmensa alegría y un sentido renovado de propósito.
